MILAGROS ALREDEDOR DEL LAGO

 

MILAGROS ALREDEDOR DEL LAGO

LEE PARA EL ESTUDIO DE ESTA SEMANA: Marcos 4:35-41; Salmos 104:1-9; Marcos 5; Números 27:17.

PARA MEMORIZAR:

“Pero Jesús no le permitió, sino que le dijo: ‘Vete a tu casa, a los tuyos, y cuéntales las grandes cosas que el Señor ha hecho contigo y cómo tuvo compasión de ti’ ” (Mar. 5:19).

Marcos 4 termina con Jesús y sus discípulos cruzando el lago de Galilea. Se levanta entonces una tormenta que Jesús calma hablando al viento y a las olas. Marcos 6 termina con una escena similar, pero esta vez con Jesús caminando sobre el agua hacia sus discípulos, que estaban en el bote.

ESPÍRITU DE PROFECÍA

Cristo debía identificarse con los intereses y las necesidades de la humanidad. El que era uno con Dios se vinculó con los hijos de los hombres mediante lazos que jamás serán quebrantados. Jesús «no se avergüenza de llamarlos hermanos». Hebreos 2:1 1.

Tal amor es incomparable. ¡Que podamos ser hijos del Rey celestial! ¡Promesa preciosa! ¡Tema digno de la más profunda meditación! ¡Incomparable amor de Dios para con un mundo que no le amaba! Este pensamiento ejerce un poder subyugador que somete el entendimiento a la voluntad de Dios.

CALMANDO UNA TORMENTA

Lee Marcos 4:35 al 41. ¿Qué ocurre en esta historia y qué lecciones podemos aprender en ella acerca de quién es Jesús?

En Marcos 4:10 al 12, parece haber descendido del bote y ahora conversar con los discípulos en privado. Ahora, tras un largo día de instrucción, los discípulos toman consigo a Jesús en el bote “como estaba” (vers. 36); es decir, muy cansado. Él se duerme inmediatamente sobre una superficie mullida que estaba tal vez en la popa del barco. Una gran tormenta se desata en el lago, y el bote corre peligro de naufragar cuando los discípulos despiertan a Jesús, quien drásticamente ordena al viento y a las olas que cesen.

Lee Salmos 104:1 al 9. ¿Cómo se asemeja la descripción de Jehová aquí con la acción de Cristo de calmar la tormenta?

La historia registrada en Marcos 4:35 al 41 armoniza con un patrón común en la Biblia, el de una “teofanía”; es decir, la aparición de Dios o de uno de sus ángeles. Estos eventos tienen comúnmente cinco características: 1) la demostración de poder divino, 2) temor humano, 3) la exhortación “no temas”, 4) las palabras de la revelación por la que Dios o el ángel aparecieron, 5) la respuesta humana a la revelación.

ESPÍRITU DE PROFECÍA

Absortos en sus esfuerzos para salvarse, [los discípulos] habían olvidado de que Jesús estaba a bordo. Ahora, reconociendo que eran vanas sus labores y viendo tan solo la muerte delante de sí, se acordaron de Aquel a cuya orden habían emprendido la travesía del mar. En Jesús se hallaba su única esperanza.

Nunca dio un alma expresión a este clamor sin que fuese oído. Mientras los discípulos asían sus remos para hacer un postrer esfuerzo, Jesús se levantó. De pie en medio de los discípulos, mientras la tempestad rugía… levantó la mano, tan a menudo empleada en hechos de misericordia, y dijo al mar airado: «Calla, enmudece».

Ni siquiera un pajarillo cae al suelo sin que lo note el Padre. El odio de Satanás contra Dios le induce a deleitarse en destruir hasta los animales. Y solo por el cuidado protector de Dios son preservadas las aves para alegrarnos con sus cantos de gozo. Pero él no se olvida siquiera de los pajarillos. «Así que, no temáis; más valéis vosotros que muchos pajarillos» Mateo 10:31 (Testimonios para la iglesia, t. 8, p. 285).

¿PUEDES OÍR UN SUSURRO POR ENCIMA DE UN GRITO?

Lee Marcos 5:1 al 20. ¿Qué podemos aprender acerca del Gran Conflicto y del poder de Jesús gracias a este asombroso relato?

El hombre se precipitó hacia Jesús. Ni una palabra se dice acerca de los discípulos, quienes probablemente hayan huido despavoridos. Cuando el hombre llegó cerca de Jesús, se postró ante él. La frase “se postró” es traducción del verbo griego proskyneō, usualmente traducido como “adorar”. Parece que el hombre reconoció que Jesús era alguien que podía ayudarlo.

Pero, cuando abrió su boca, los demonios que estaban dentro de él le gritaron a Jesús, quien fue, sin embargo, capaz de escuchar por sobre los gritos de ellos la súplica de ayuda susurrada por el hombre. Cuando ellos rogaron a Jesús que les permitiera ir a un hato de cerdos, él les permitió entrar en estos. Todos esos animales, cerca de dos mil, se precipitaron al mar por un despeñadero y se ahogaron. Aquello fue un desastre financiero para sus dueños.

ESPÍRITU DE PROFECÍA

Este suceso fue permitido para que los discípulos viesen el poder malévolo de Satanás sobre hombres y animales, pues quería que sus discípulos conociesen al enemigo al que iban a afrontar, para que no fuesen engañados y vencidos por sus artificios. Quería, además, que el pueblo de aquella región viese que él, Jesús, tenía el poder de romper las ligaduras de Satanás y libertar a sus cautivos. Y aunque Jesús se alejó, los hombres tan milagrosamente libertados quedaron para proclamar la misericordia de su Bienhechor (El conflicto de los siglos, pp. 504, 505).

Al ocasionar la destrucción de los cerdos, Satanás se proponía apartar a la gente del Salvador e impedir la predicación del evangelio en esa región. Pero este mismo incidente despertó a toda la comarca como no podría haberlo hecho otra cosa alguna y dirigió su atención a Cristo. Aunque el Salvador mismo se fue, los hombres a quienes había sanado permanecieron como testigos de su poder. (El ministerio de curación, p. 66).

EN LA MONTAÑA RUSA CON JESÚS

Lee Marcos 5:21 al 24. ¿Qué características de Jairo se destacan en particular?

Esta desesperación se hace evidente al postrarse ante Jesús. Su ruego resulta comprensible para cualquier padre; su hija está agonizando. Pero tiene fe en que Jesús puede ayudarlo. Sin pronunciar una sola palabra, Jesús parte con el padre rumbo a su casa.

Lee Marcos 5:25 al 34. ¿Qué interrumpe la marcha hacia la casa de Jairo?

La mujer se acerca a Jesús desde atrás y toca su manto. Inmediatamente recupera la salud. Pero Jesús se detiene y pregunta: «¿Quién ha tocado mi ropa?”

 

La mujer, que había estado tan enferma, estaba de pronto recuperada. Pero temía que Jesús estuviera disgustado por lo que había ocurrido. Aquello fue un viaje vertiginoso para las emociones de ella. Pero Jesús quería sanar su alma, no solo su cuerpo.

ESPÍRITU DE PROFECÍA

Este anciano de los judíos vino a Jesús con gran angustia, y se arrojó a sus pies exclamando: «Mi hija está a la muerte: ven y pondrás las manos sobre ella para que sea salva, y visara».

Jesús se encaminó inmediatamente con el príncipe hacia su casa. Aunque los discípulos habían visto tantas de sus obras de misericordia, se sorprendieron al verle acceder a la súplica del altivo rabino (El Deseado de todas las gentes, p. 3 10).

Cristo no hizo la pregunta [«¿Quién es el que me ha tocado?»] para obtener información. Quería dar una lección al pueblo, a sus discípulos y a la mujer, infundir esperanza al afligido y mostrar que la fe había hecho intervenir el poder curativo. La confianza de la mujer no debía ser pasada por alto sin comentario.

RECHAZO Y ACEPTACIÓN

Lee Marcos 6:1 al 6. ¿Por qué Jesús fue rechazado por la gente de su propio pueblo?

Su paso de ser un obrero manual a un maestro les resultaba difícil de aceptar. Otra razón para la animosidad de ellos pudo haber sido el hecho de que realizó la mayoría de sus milagros en Capernaum (ver Luc. 4:23). Además, él ya había tenido un desacuerdo con su familia (Mar. 3:31-35).

Leer Marcos 6:7 al 30. ¿Qué contraste existe entre la misión de los doce apóstoles y la decapitación de Juan el Bautista?

Esta es la tercera historia sándwich en Marcos (ver la lección 3). La misión de los doce apóstoles consistente en llevar el mensaje de Jesús a todas partes se encuentra en abierto contraste con la encarcelación y el silenciamiento de Juan el Bautista.

El acallamiento de la voz estentórea del Bautista ocurre mientras los doce apóstoles proclaman su mensaje de arrepentimiento, así como lo había hecho antes Juan. La muerte de Juan presagia la de Jesús. Juan es ejecutado, sepultado y reportado como resucitado de entre los muertos (Mar. 6:14-16, 29), como ocurriría con Jesús (Mar. 15; 16). Estas historias paralelas apuntan a una futura crisis para Jesús y sus seguidores.

ESPÍRITU DE PROFECÍA

Su incredulidad engendró malicia. Satanás los dominó, y con ira clamaron contra el Salvador. Se habían apartado de Aquel cuya misión era sanar y restaurar; y ahora manifestaban los atributos del destructor (El Deseado de todas las gentes, p. 206).

El mensaje de los discípulos era el mismo que el de Juan el Bautista y el de Cristo mismo: «El reino de los cielos se ha acercado». No debían entrar en controversia con la gente acerca de si Jesús de Nazaret era el Mesías; sino que en su nombre debían hacer las mismas obras de misericordia que él había hecho.

El pueblo no estaba dispuesto a aceptar a Jesús, porque los gobernantes no creían en él. Era Jesús varón de dolores, experimentado en quebranto. Los caudillos judíos no podían dejar que los rigiese la vida austera y abnegada de Jesús. Deseaban disfrutar de los honores que el mundo otorga. A pesar de todo, muchos seguían al Hijo de Dios y escuchaban sus enseñanzas, alimentándose con las palabras que tan misericordiosamente fluían de sus labios. Tenían profundo significado, y, sin embargo, eran tan sencillas que los más débiles podían entenderlas.

 

UNA CLASE DIFERENTE DE MESÍAS

Lee Marcos 6:30 al 52. ¿Qué problema enfrentaron Jesús y los discípulos, y cómo fue resuelto?

Al atardecer, los discípulos recomiendan despedir a la multitud para que vayan a buscar comida, pero Jesús les dice que alimenten al gentío. El diálogo subsiguiente (Mar. 6:35-38) ilustra el hecho de que los discípulos están pensando en términos humanos acerca de cómo resolver el problema. Pero Jesús lo soluciona alimentando milagrosamente a la gran multitud con apenas cinco panes y dos peces.

Esta noción se ve reforzada por la referencia a que Jesús vio a esas personas como “ovejas sin pastor”, una cita parcial de Números 27:17, donde Moisés pide a Dios que designe un líder como sucesor suyo para Israel. Esta fraseología acerca de un pastor para el pueblo de Dios aparece por doquier en el Antiguo Testamento, típicamente en referencia a la falta de un líder o rey para Israel (compara con 1 Rey. 22:17; 2 Crón. 18:16; Eze. 34:5, 6).

En lugar de la opinión popular acerca del Mesías como un rey que libera a Israel, él viene a liberar a las personas de la esclavitud del pecado. Él es, en verdad, el Señor de la naturaleza. Pero no vino a gobernar, sino a dar su vida en rescate por muchos (Mar. 10:45).

ESPÍRITU DE PROFECÍA

Él recompensará al que confíe sencilla y honradamente en él. Lo poco que se emplea sabia y económicamente en el servicio del Señor del cielo, se multiplicará al ser impartido. En las manos de Cristo, la pequeña provisión de alimento permaneció sin disminución hasta que la hambrienta multitud quedó satisfecha. Si vamos a la Fuente de toda fuerza, con las manos de nuestra fe extendidas para recibir, seremos sostenidos en nuestra obra, aun en las circunstancias más desfavorables, y podremos dar a otros el pan de vida (El Deseado de todas las gentes, pp. 338, 339).

Su espíritu estaba dominado por la creencia popular de que el Mesías sería un príncipe terrenal, que exaltaría a Israel a la altura de un imperio universal, y no pudieron comprender el significado de sus palabras cuando les anunció sus padecimientos y su muerte (El conflicto de los siglos, p. 345).

Dios tiene en la tierra un pueblo que, con fe y santa esperanza, está siguiendo el rollo de la profecía que rápidamente se cumple, y cuyos miembros están tratando de purificar sus almas obedeciendo a la verdad a fin de no ser hallados sin manto de boda cuando Cristo aparezca (Testimonios para la iglesia, t. 4, pp. 301, 302).

PREGUNTAS PARA DIALOGAR:

Si alguien te preguntara de qué te liberó Jesús, ¿cuál sería tu respuesta?

    Dialoguen acerca de por qué a veces Dios permite que algunas personas buenas como Juan el Bautista sean encarceladas y ejecutadas. ¿Qué consuelo o esperanza podemos encontrar a pesar de estas cosas difíciles?

    ¿Qué lecciones hay en la alimentación de los cinco mil para una iglesia o una congregación que cuenta con pocos recursos?

    Comparen las opiniones populares actuales acerca de Jesús con la imagen que Marcos 5 y 6 hace de él. Es decir, ¿qué sucede con quienes usan a Jesús para obtener poder político y para dominar a otros?

Entradas populares