LA VERDADERA OFRENDA

 

 

LA VERDADERA OFRENDA

En el siguiente ensayo tratare de enfocarme en temas bíblicos que pasaron en los inicios de la humanidad con Adán, Eva y sus hijos Caín y Abel, nos remontaremos a los albores de la humanidad, pero sin perder la óptica a los tiempos actuales, de esta manera podremos entender mucho de nuestros actos y acciones que nos marcan día a día.

Cierto día escuche que cada mañana es un nuevo bautizo, pues renacemos de las cosas malas que han pasado en el día anterior; debemos de reconocer que no tenemos la fortaleza de Jesús que duro 40 días en el desierto, tentado como humano, el triunfo ante lucifer, con la palabra escrito esta. De ahí la importancia de bautizarnos todos los días con su palabra y entrar en oración y conversar con el como un amigo, el cual nunca nos abandonará y siempre estará dispuesto a abrir los brazos para tomarnos y redimirnos de nuestros pecados.

Nos remitiremos a las escrituras Génesis 4: 1-5 Hebreos 11: 4, como está escrito en las sagradas escrituras se relatan el nacimiento de Caín, como el primogénito para los ojos de su madre el hijo de la promesa, el cual redimiría el pecado original, el salvador de la humanidad, Caín se dedicaba a labrar la tierra, un oficio muy físico y sacrificado; pues con el sudor de su frente hace producir la tierra, siempre con la bendición de Dios.

Nació Abel el segundo hijo, el cual no tenía tanta importancia como el primogénito, pues él era considerado como el salvador, Abel se dedicaba al oficio de pastear ovejas su misión principal cuidar de ellas, llevarlas a pastos verdes, protegerlas de los peligros del campo; pero su oficio no era producir frutos por esfuerzo de el mismo; sin no tener paciencia y amor para cuidar su rebaño que le fue entregado.

Cuando los dos hermanos llevaron los holocaustos, ofrendas al señor nuestro Dios, Caín llevo el fruto de su trabajos vegetales y hortalizas ofreciéndolo, en contraposición su hermano llevo el primogénito de sus ovejas la más gorda y perfecta, adicionalmente ofreció los frutos de la tierra.

Los dos hermanos llevaron sus ofrendas, pero la ofrenda de Abel si fue recibida con agrado, más la de Caín no, esto llevo al enojo y cólera de parte de Caín hacia su hermano, debemos entender que las ofrendas y el holocausto son diferentes, la primera es lo que nos pide dios, el cordero representa la pasión y muerte de nuestro señor Jesús, el pago nuestra salvación con sangre, reitero con sangre somos salvos y el símbolo que todo es cierto es su resurrección como prueba irrefutable que el venció a satanás en todas las maneras.

El holocausto es el agradecimiento que ofrendamos en forma voluntario para agradecer las bendiciones de Dios, lo que ofreció Caín era incompleto solo lo que le parecía, mas no lo que le exigía nuestro señor, Nosotros como hijos de Dios debemos de cumplir con lo que nos pide y ofrendemos en forma de agradecimiento, no tratemos de pensar que por nuestras obras seremos salvos, no seamos como el joven rico que cumplió la ley, pero no cumplió lo más importante, dejarlo todo y seguir el camino de cristo, prefirió sus otros ídolos y perdió la salvación.

La verdad debemos de reconocer todos los días que somos pecadores y aceptemos la voluntad de Dios para nuestras vidas, dejemos que Jesús vaya delante de nosotros y todo va salir bien, ofrezcamos la ofrenda y el holocausto, para que se agradable a nuestro señor, tengamos una vida que de testimonio de que Jesús es nuestra guía y en esta semana santa cumplamos la gran comisión, ir a hacer discípulos y bautizarlos en el nombre del padre del hijo y el espíritu santo, Amen para todos y todas y que el señor los guarde siempre.

Entradas populares